¿Qué es mejor, crema hidratante o aceite corporal?
El mundo de la cosmética es amplísimo y, por eso, a menos que tengas bastante conocimiento de los productos que existen, de cuáles son sus características específicas y de cómo aplicar cada uno de ellos; lo cierto es que, a la hora de adquirir un producto concreto, puede ser bastante complicado entender cuál de ellos va a ser más adecuado para ti en función a tus necesidades, a tu tipo de piel y a tu presupuesto.
Es por este motivo que también una de las preguntas más habituales que se realizan las personas que quieren empezar a cuidarse es la de si vale la pena escoger una crema hidratante o un aceite corporal, puesto que, aunque ambos son parecidos, también cuentan con unas claras indicaciones y usos que los diferencian.
Si quieres saber cuáles son las ventajas y desventajas de las cremas hidratantes o por qué utilizar un aceite corporal en lugar de una crema, así como otras cuestiones similares. En este artículo tratamos todo esto detenidamente para que entiendas cuáles son las diferencias entre los aceites y las cremas.
Ventajas y desventajas de las cremas hidratantes
A la hora de hablar de las cremas, todo el mundo sabe que existen muchísimos tipos diferentes, algunas recomendadas por especialistas y dermatólogos y otras que son de uso diario y común y que pueden comprarse por cualquier tipo de usuario. Además de esto, generalmente existen cremas renovadoras, oxigenantes, regenerativas, tensoras y reafirmantes, y muchas de ellas cuentan con elementos sintéticos o naturales.
Como puedes ver, son tantos los factores a considerar que es importante entender bien que también, a la hora de comprar una crema, hay que adecuarse siempre a la zona del cuerpo a la que se vaya a aplicar, puesto que cada una de ellas estará creada con unos compuestos distintos que afectarán de mejor o peor manera nuestra piel y, por lo tanto, escoger la adecuada será imprescindible para que esta surta efecto.
Ventajas de las cremas hidratantes
Si hablamos de las ventajas de las cremas hidratantes, tenemos que mencionar que este tipo de formato suele ser el más habitual y escogido por la gran mayoría de la población, precisamente porque los beneficios son los que contamos:
- Cuando se utiliza una piel de forma diaria, la salud de la piel adquiere una mejora bastante visible que nos ayuda a lucir una piel muchísimo más sana, suave y tersa.
- Muchas cremas hidratantes no solo nos ayudan a mejorar la estética de nuestra piel, sino que también nos ayudan a combatir la radiación solar, por lo que cuentan también con protector solar, algo que resulta esencial para prevenir manchas y arrugas, así como enfermedades cutáneas.
- Las cremas son de fácil aplicación y, generalmente, no hay que hacer nada más que lavar la cara con anterioridad para poder aplicarlas.
- La mayoría de cremas que venden en el mercado son para todo tipo de piel, aunque existen incluso cremas específicas para pieles grasas o secas, y también para pieles atópicas, por lo que puedes encontrar la perfecta para ti.
- Gracias a todos los minerales, nutrientes y vitaminas con los que se fabrican, resultan una excelente forma de proporcionarle a nuestra piel ingredientes extra con los que mantenerse sana.
Desventajas de las cremas hidratantes
A la hora de hablar de los principales inconvenientes de utilizar una crema hidratante para la piel, nos vamos a encontrar con muchos menos, sin embargo, es importante tener en cuenta también lo siguiente:
- Muchas cremas son de absorción lenta y por su componente pueden ser bastante más empalagosas. La mayoría de estas cremas son cremas de noche y no son muy adecuadas para utilizarlas por la mañana, ya que no solo se notarán sobre nuestra piel, sino que al entrar en contacto con la polución pueden terminar por no solo no resultar efectiva, sino también contraproducentes.
- Las cremas que más ayudan a la piel suelen tener un coste bastante más elevado que las cremas más accesibles, por lo que realmente cuidar nuestra piel se paga.
- Es importante siempre asegurarse de que las cremas que compramos son de buenas marcas, puesto que existen muchísimas en el mercado que hacen uso de productos químicos bastante fuertes que pueden terminar o bien por hacernos gastar el dinero en balde o por crearnos alergias.
Ventajas y desventajas de los aceites corporales
La contraparte de las cremas para el cuerpo son los aceites corporales, que han empezado a ponerse bastante de moda recientemente, ya que ofrecen alternativas muy jugosas a la hora de tratar y cuidar nuestra piel de una forma muy efectiva.
Es por este motivo que los aceites, aunque siempre se han usado para tratar, sobre todo, las pieles más secas, han terminado por popularizarse para todo tipo de pieles, y esto se debe precisamente a todos los motivos que comentamos a continuación:
Ventajas de los aceites corporales
Los aceites corporales generalmente son bastante naturales, así que hablamos de que cuentan con numerosas ventajas, tales como estas:
- La mayoría de aceites corporales cuentan con esencias y aromas muy característicos y, por lo tanto, una de las principales ventajas de los aceites corporales es que estos no solo te ayudan a hidratar la piel, sino que se aseguran de dejarte un excelente perfume en el cuerpo.
- Los aceites también son muy utilizados para prevenir todo tipo de estrías y celulitis, pues sirven para aumentar la elasticidad de la piel una vez que esta comienza a arrugarse.
- Otro de los factores principales de los aceites corporales es que estos hidratan la piel en profundidad, seguramente mucho más que algunas cremas. Sin embargo, no tienen por qué usarse por separado, ya que son muchas las personas que, para conseguir una hidratación más prolongada, combinan el aceite con las cremas, de modo que así el cuerpo queda muchísimo más protegido.
- Tal y como hemos mencionado, son especialmente útiles para las pieles más secas, ya que gracias a la grasa del aceite ayudan a que la piel absorba muchísimo más estos minerales y vitaminas, y ayudan a fortalecer los tejidos.
- Los aceites tonifican y rejuvenecen, por lo que mientras que se apliquen de forma constante los aceites corporales ayudan siempre a evitar la pérdida de agua gracias a su alto contenido en grasas, lo que resulta esencial para tener la piel bien hidratada y nutrida.
- Ya que la mayoría de aceites para el cuerpo se crean utilizando mezclas de elementos naturales, como pueden ser, por ejemplo, flores, frutos secos, cítricos, etcétera, estos aportan muchísimo brillo y elasticidad que ayuda a mejorar el estado general de la piel, tanto por dentro como por fuera.
Desventajas de los aceites corporales
Sin embargo, pese a todas sus ventajas, es cierto que hay que mencionar algunos apuntes respecto al uso de los aceites corporales para que los tengas en cuenta y decidas si prefieres utilizar estos o las cremas hidratantes.
- La mayoría de los aceites corporales no utilizan ningún tipo de añadido de protección solar, por lo que resultan algo menos indicados, sobre todo, si vas a utilizarlos a la hora de salir a la calle. De esta forma, vas a necesitar complementarlos con un buen protector para evitar que los rayos solares puedan perjudicarte la piel.
- Otro de los puntos débiles de los aceites corporales es que estos son muy grasosos, por lo que en ciertas ocasiones no se recomiendan para las personas que cuentan con la piel grasa, ya que generará más exceso todavía de este sebo y, por lo tanto, pueden terminar por crear granos en la piel.
- Precisamente porque hablamos de un tipo de producto basado en aceite, estamos ante un producto que resulta bastante pastoso a la hora de aplicarlo en la piel. Por lo que vamos a necesitar utilizar este producto siempre con calma para evitar que pueda pegarse, tanto a las sábanas antes de dormir como a la ropa si vamos a salir.
- Hay aceites bastante caros en el mercado, debido a los componentes tan exclusivos que utilizan, al igual que sucede con las cremas, por lo que hablamos de un tipo de producto que igual no es accesible para todo el mundo.
Diferencias entre cremas hidratantes o aceites corporales
Llegados a este punto, quizás las diferencias más básicas pueden parecer obvias, pero, aun así, es cierto que tenemos que entender bien cómo funciona cada producto y cuáles son los usos y aplicaciones de cada uno de ellos para comprender bien en qué se diferencian y, por lo tanto, cuál de ellos va a ser más adecuado para ti.
Una de las principales diferencias entre los aceites corporales y las cremas hidratantes es su textura. De esto dependerá si te gusta más aplicar un producto con una absorción rápida o lenta y si prefieres que la hidratación se prolongue o sea más corta, ya que en el caso de que te interese más lo primero, seguramente debas optar por una crema; mientras que sí prefieres lo segundo, deberás decantarte por los aceites.
Otro aspecto que hay que considerar va a ser la forma de aplicar estos dos productos, puesto que los aceites generalmente funcionan mejor al aplicarlos sobre la piel húmeda, ya que es precisamente mediante las gotas de agua que se quedan adheridas a nuestro cuerpo que el aceite se absorbe en nuestra piel. Por el contrario, las cremas se usan en seco, así que esto también debe tenerse en cuenta. Así que, si eres una persona de ducha rápida, en ese caso la crema va a ser más adecuada para ti, pero si prefieres darte un baño largo y dedicarte el tiempo suficiente, entonces puedes utilizar aceite sin problema.
Además de esto, también hay que tener claro que, dependiendo de la zona en la que vaya a utilizarse el producto, será más adecuado utilizar crema o aceite. Si hablamos de hidratar el cuerpo en general, ambos van a ser adecuados, pero, por ejemplo, si lo que nos interesa es mejorar el estado facial entonces sin duda las cremas van a ser más acertadas; y, por el contrario, si lo que queremos es mejorar la elasticidad de zonas como el vientre, los glúteos u otras partes que sufren de celulitis o estrías, los aceites van a ser tu mejor aliado.